OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com/vía COMUNICADO).- En la muestra “Biuces”, Rubén Ojeda Guzmán (Oaxaca, México, 1991) replantea la pregunta sobre si la pintura realmente ha muerto. El joven artista realizó una serie de pinturas que remiten a una carnicería. Utilizando el óleo como material que le brinda una plasticidad y corporeidad idónea.
Ojeda Guzmán genera un diálogo entre las texturas y colores de carne con la riqueza de su pintura.
Uno de los pasillos del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) de Avenida Juárez se convirtió en una especie de carnicería, en ese sitio el espectador puede admirar sus imágenes que evocan olores, vísceras y sangre. En entrevista comentó que “Biuces”, “es como un estatuto sobre la pintura, de cómo funciona en una de sus aristas, por qué se le ha sentenciado tantas veces de que está muerta, a mi me llama la atención ese estatuto de muerte, o que le habían quitado la vida”.
El título de la muestra tiene que ver con los residuos, aquellas vísceras que quedan al final, algo que no se desperdicia. Es lo mismo que el creador hace al tomar como materia los restos de pintura y convertirlos en una pieza.
“Me llamaba la atención este estado residual de la pintura, en el arte contemporáneo está al final, es lo que sobra o ya no la consideran tan legítima en los circuitos culturales contemporáneos o globales, y digamos que se duda mucho de la pintura y los pintores actualmente”.
Es por ello que Rubén Ojeda pensó la pintura como algo residual, esto tiene que ver con que anteriormente había trabajado con los residuos de pintura de las paletas de otros creadores.
A este joven pintor desde hace varios años le ha llamado la atención los entornos campestres, creció en un sitio donde los cerdos y las vacas eran parte de la vida cotidiana, él comenzó pintando todo lo que veía, esa fijación por los cortes de carne, la lleva tatuada en los brazos, en su antebrazo derecho se admiran las siluetas de los animales con líneas punteadas que dan a entender o sugieren cortes de carnes.
Rubén Ojeda Rubén, vive y produce en Oaxaca de Juárez, se graduó con honores de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) de la Licenciatura en Artes Plásticas. Se hizo acreedor a la beca Jóvenes Creadores del FONCA 2014-15 en Medios Alternativos, ganó el segundo lugar del II Salón de Arte Universitario del IMACP y fue seleccionado del Proyecto Joven 2011 del Museo de los Pintores Oaxaqueños. De sus exposiciones individuales destacan: La pintura en el mercado (Galería Central Universitaria UABJO, Oaxaca, 2015), Tratado de la ©reatividad (Luz de la Nevera, Cholula, 2014), y Carne de Cañón (Museo de los Pintores Oaxaqueños, Oaxaca, 2012).