CUIABÁ, Brasil s (sucedióenoaxaca.com/vía COMUNICADO).- El jaguar es el felino más grande de América y uno de los principales depredadores tope que aportan a la salud y equilibrio de los ecosistemas en gran parte del continente. Son prioritarias y urgentes las acciones encaminadas a su conservación a nivel regional, particularmente para reducir la pérdida y fragmentación de su hábitat, las interacciones negativas entre humanos y jaguares, prevenir su matanza y el comercio ilegal de individuos, partes y derivados.
Representantes de gobierno de 18 países se reunieron del 18 al 22 de septiembre en Cuiabá, Brasil, la Primera Reunión de Estados del Área de Distribución del Jaguar, organizada por la Secretaría de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) con la finalidad de promover el diseño e implementación de corredores transfronterizos entre países donde se distribuye el jaguar, fortalecer los mecanismos de cooperación, canalizar inversiones para la conservación de la especie y reducir las amenazas a la conectividad de sus hábitats.
Por otro lado, fortalecer las capacidades y el manejo de información de los principales actores involucrados en su conservación a través de una plataforma continental de información y colaboración de esta especie icónica de América Latina.
Durante la reunión se compartió información y experiencias para:
Identificar los principales elementos y criterios para establecer un sistema de monitoreo de conservación, matanza ilegal de jaguares, tráfico ilícito de sus partes y derivados, y otros aspectos clave relacionados con el jaguar a largo plazo.
Identificar territorios prioritarios en áreas nacionales y transfronterizas, incorporando consideraciones sobre la matanza ilegal y el tráfico ilícito de jaguares y su impacto sobre las poblaciones silvestres, y
Analizar las posibles sinergias entre las distintas iniciativas y convenios para la conservación del jaguar, incluyendo la identificación de unidades de conservación, corredores biológicos, oportunidades de financiación sostenible y reducción de la demanda del comercio ilegal.
En esta Reunión participaron, como parte de la Delegación Mexicana, las tres Autoridades CITES nacionales: la Dirección General de Vida Silvestre de la SEMARNAT (Autoridad Administrativa), la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO; Autoridad Científica) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA; Punto Focal de Aplicación de la Ley), quienes presentaron información sobre el estado de las poblaciones de jaguar, las acciones para su conservación y los esfuerzos de aplicación de la ley a nivel nacional.
¿Qué hace México por el Jaguar?
México fue el primer país en contar con una estimación nacional del tamaño poblacional de jaguar a través del proyecto CENJAGUAR (2007) realizado por académicos y autoridades. Las estimaciones sugieren una aparente tendencia positiva en sus poblaciones (aproximadamente 4 mil jaguares en 2008-2010 y 4 mil 800 jaguares en 2016-2018) y que su distribución potencial abarca casi toda el área de distribución histórica, aunque la especie ahora ocupa menos área y más fragmentada.
Las autoridades mexicanas cuentan con el Programa de Acción para la Conservación de las Especies – Jaguar (Panthera onca) o PACE desde 2017, para implementar acciones que aseguren la persistencia de la especie y su hábitat en seis componentes interconectados: 1) Protección, 2) Restauración, 3) Manejo, 4) Conocimiento, 5) Cultura, y 6) Gestión.
La PROFEPA es la encargada de realizar acciones de inspección y vigilancia para proteger al jaguar y su hábitat; reducir ilícitos ambientales; detectar y reducir su cacería furtiva y la de sus presas naturales. En el marco de sus operativos, también se imparten pláticas de concientización a vigilantes ambientales y población general sobre la importancia de la conservación de la especie, principalmente en sitios de alta incidencia con jaguares.
En ese sentido, en México se realizan acciones para disminuir casos de depredación por jaguares y otros carnívoros silvestres, en coordinación con la academia, organizaciones de la sociedad civil y autoridades. Por ejemplo, existe el Seguro contra Ataques de Depredadores de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG) para compensar a los ganaderos que han tenido pérdidas por jaguar u otro depredador silvestre y promover la coexistencia y la conservación de estas especies.
Este majestuoso felino ha sido sujeto de acciones de persecución y erradicación en los últimos tres siglos llevándolo al borde de la extinción. Por ello, su conservación efectiva es clave para mantener el equilibrio en la composición y estructura de los ecosistemas.