OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com/vía FILO).- “Siento que mientras tenga algo que decir escrito estoy viva, estoy viva siempre”, dijo Margo Glantz durante la celebración que le ofreció por sus 90 años de vida la 40 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO).
La escritora, viajera y tuitera, que ya ha sido homenajeada por este festival y que ahora se presentó nuevamente para celebrar su cumpleaños, estuvo acompañada por Gabriela Jáuregui, cuyas preguntas fueron desentrañando la vida y obra de la autora de más de 25 libros y pionera de la incursión femenina en la literatura mexicana.
“Mi cuerpo es un cuerpo que poco a poco ha perdido su lozanía, su esplendor. La vitalidad la sigo manteniendo, pero para mí esa vitalidad es importante ejercerla donde siempre la he ejercido: en la lectura, en la escritura, en la conversación literaria, en el encuentro con otra gente que permite la posibilidad de crear cosas nuevas”, dijo sobre su arribo a las nueve décadas.
La conversación, de la cual fue partícipe el público de Margo a través de sus comentarios y preguntas, fue desde sus orígenes como escritora hasta sus obsesiones. Al respecto, recordó que uno de sus grandes temas ha sido el cuerpo femenino y su erotismo, esto, pese a que en su juventud se consideraba a sí misma fea.
“Leía y veía que el cuerpo de las mujeres estaba colonizado por la mirada masculina. En la facultad quise cambiar la mirada del cuerpo femenino con mi propia mirada. Me fui construyendo un imaginario erótico”. Dicho imaginario se convirtió tiempo después en el libro Apariciones, donde aparece la niña que abre las piernas, para tocar el violonchelo.
A través de este personaje retrata una rebelión contra lo que para ella es un acto de opresión hacia la mujer. “Uno de los problemas fundamentales en contra de las mujeres es que para ser recatadas deben cerrar las piernas. Las piernas se abren para hacer el amor, para dar a luz y tocar el chelo. Las mujeres que abrían las piernas eran las prostitutas y abrirlas era ver el sexo como algo nefando. La niña es el futuro”.
Considerada por sus amistades y sí misma como moderna y transgresora, habló también sobre sus asistencias a la Facultad de Filosofía y Letras, en los años 60, con pantalón. “No podías hacer esa transgresión de usurpar el ropaje masculino” dijo.
Asimismo, de su entrada a la Academia Mexicana de la Lengua donde le pidieron ir de corbata y no encontró baño para mujeres, sólo para hombres. “Era un escándalo que una persona que escribiera una novela como Apariciones entrara en la academia y además fuera mujer”.
Pese al avance registrado en las últimas décadas para las mujeres, Margo considera que aún hay mucho por hacer. “Sigue siendo un mundo muy machista que no soporta que las mujeres estemos ganando un terreno muy grande. Esta Feria es un ejemplo del terreno que ha ganado la mujer, es muestra de que realmente una de las cosas más importantes es la presencia femenina y la organización de las mujeres al hacerla”.
Al finalizar la charla donde habló también de sus primeros libros, el autoritarismo de la literatura convencional, sus experimentaciones literarias e infancia, la 40 FILO le ofreció a Margo y al público un concierto a cargo de la Banda Azul de Oaxaca, que interpretó algunos temas oaxaqueños y una adaptación del tema Azúcar Amargo, de Fey, ahora, ¡Azúcar a Margo!
Margo Glantz nació en 1930 en la Ciudad de México. Es escritora, viajera y tuitera. Enseña en la UNAM, es investigadora, profesora y creadora emérita del FONCA. Ha escrito más de 25 libros de ensayo y de creación. Ha sido profesora visitante en Yale, Harvard, Stanford, Alicante, Barcelona, Viena. Ha recibido varios doctorados honoris causa, las becas Guggenheim, Rockefeller y entre otros premios el Nacional de Ciencias y Artes 2004, el FIL 2010, el Manuel Rojas 2016 y los Alfonso Reyes, 2017 y 2019.
Nettel y Mesa presentan sus libros en la 40 FILO
Guadalupe Nettel y Sara Mesa hablaron sobre sus libros La hija única y Un amor, respectivamente, como parte del Programa Literario de la 40 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO). Acompañadas por Elvira Liceaga como moderadora, abordaron los detalles de estos títulos con el público que se conectó a la actividad virtual.
Nettel, originaria de México, relató que La hija única trata sobre tres mujeres enfrentadas a la maternidad, cada una con una forma distinta de hacerlo. Este retrato de la familia en el mundo actual inicia cuando a Alina, poco después de cumplir los ocho meses de embarazo, conoce que su hija no podrá sobrevivir al nacimiento. Ella y su compañero emprenden un doloroso proceso de aceptación y duelo, una extraña oportunidad para conocer a esa hija a la que les cuesta renunciar.
Laura, amiga de Alina, cuenta el conflicto de esta pareja, plagado de muestras de amor y forma de superar la frustración. Paralelamente relata la historia de Doris, madre soltera de un niño con problemas de comportamiento.
Mesa, por su parte, dijo sobre Un amor que se desarrolla en La Escapa, donde Nat, una joven e inexperta traductora, acaba de mudarse. Su casero, que le regala un perro como gesto de bienvenida, no tardará en mostrar su verdadera cara, y los conflictos en torno a la casa rentada, se convertirán en una verdadera obsesión para ella. Se aborda, de manera implícita pero constante, el asunto del lenguaje no como forma de comunicación sino de exclusión y diferencia.
Las autoras coincidieron en que ambos libros tienen grandes similitudes. Al respecto, Nettel apuntó que son similares en el punto de partida. “Ese momento privilegiado de poner todo a un lado y de repente hacer recuento de la vida y qué hemos hecho hasta ahora y qué viene en el futuro y cómo la vida con sus cosas inesperadas y sorpresas nos cambia esa configuración que creíamos tener tan claras”.
Mesa también resaltó que ambos libros están protagonizados por mujeres. Especialmente el suyo, una que se enfrenta al machismo y actitudes nocivas en contra de las mujeres con las que muchas lectoras podrán identificarse.
Esta presentación completa puede ser vista en el Facebook de la 40 FILO, @FILOaxaca, donde las actividades de este año quedan grabadas por celebrarse de manera virtual.
Infancias libres de prejuicios, en la 40 FILO
Para charlar sobre el derecho de las y los niños a desarrollarse libres de prejuicios y roles de género que les incomoden, se ofreció la charla Infancias libre en la literatura infantil, como parte de la 40 Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO). Participaron las autoras Valeria Gallo y Ana Romero; los autores Sergio Andricaín y Diego Josué Gontorr; y la editora de Ediciones Naranjo, Ana Laura Delgado.
Fungió como moderador José Francisco García quien abrió la charla con una experiencia propia, y es que cuando era niño deseaba ser una sirena. Un día que estaba dibujando estos seres, su abuelo lo descubrió, le quitó la hoja de papel y la tiró a la basura, con el argumento de que no debía dibujar eso pues era de niñas.
Gallo y Romero son autoras de Nosotras / Nosotros, libro que pone en contraposición las cosas que se han permitido o prohibido a niñas y niños sólo por su sexo. Sobre la posibilidad de infancias libres de roles de género, apuntó “más que educar a las chavitas y chavitos es a los adultos, porque las niñas y niños no traen esos prejuicios, los adultos son los que se los van metiendo. Eduquen a sus papás, eduquen a los demás para que abran la mente y entiendan cosas que, además, cuando las analizamos son una libertad muy básica”.
Gontorr y Andricaín, por su parte, son autores de Sirena y punto, historia muy cercana a la anécdota contada por el moderador. Andricaín ilustró el tema con su propia historia de niño. “Tuve que aprender a defenderme y a crear mi mundo. Había cosas que me gustaban de las niñas y cosas que me gustaban de los niños. De los niños no me gustaban sus juegos, de las niñas sus muñecas porque había que contar historias. Siempre defendí esos espacios desde la creación y los libros me ayudaron a buscar soluciones”.
Agregó que “la infancia es una etapa que hay que vivirla intensamente y los padres tienen la gran responsabilidad de lograr que los niños busquen su propio camino. Mis padres tenían cierto concepto del género pero fueron aprendiendo conmigo. El proceso de educación va en dos direcciones, con los niños para que vean esas posibilidades de ser y también a los padres presentándoles que no hay nada raro en una niña o niño diferente, porque es el ser más puro y debemos procurar que fluya para que cuando sea adulto, sea feliz”.
Delgado, quien en su editorial ha dado espacio para libros de estos temas, dijo que “en la edición de los libros algo que tengo muy claro es cómo vamos a lograr que los niños accedan a distintos mundos. Cómo le podemos acercar a los niños y jóvenes lecturas importantes para su desarrollo. ¿Por qué tenemos que hacer eso?, ¿por qué queremos seres humanos que comprendan al que es diferente? En cómo se abordan estas cuestiones, ahí es donde cuidamos la calidad literaria y la calidad artística”.
La presentación completa y la cual está dirigida a niñas, niños y sus familias, puede ser vista completa en el Facebook de la 40 FILO, @FILOaxaca, donde permanece grabada para ser vista nuevamente.