“Ya un niño que posee la música no es pobre. El adquirir la música, el tocar un instrumento, el cantar en un coro, lo separa completamente de la línea de pobreza, lo convierte en un niño rico en valores y sobre todo en posibilidades de crecimiento y de desarrollo”. | JOSÉ ANTONIO ABREU
OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com). – Las ojeras revelan cansancio; pero la sonrisa transmite entusiasmo. Ambas son notorias en el rostro de Karina Barón Ortiz, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública del gobierno del estado de Oaxaca (SESESP).
No se trata de un cargo estrictamente burocrático. Sí, ella supervisa la correcta aplicación de recursos públicos destinados a corporaciones policiacas, a programas de capacitación y acreditación de personal de guardia y seguridad, y al Centro de Control, Comando y Comunicación mejor conocido como C4. Pero también le toca delinear y ejecutar programas para la prevención del delito, porque como bien dice el dicho, más vale prevenir que lamentar.
Parque Primavera. Mediodía de domingo. Último día de agosto. Karina Barón se despide de mandos militares tras la ceremonia de clausura de la exposición «La Gran Fuerza de México», un ejercicio de proximidad con la ciudadanía del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Fuerza Aérea, que visitaron 150 mil personas aproximadamente en el Parque Primavera de la capital del estado.
No sé si fue casual o previsto por su equipo, pero nos fuimos a conversar en medio de una exposición fotográfica de insectos donde lucía la imagen enorme de una mariposa. Ella, Karina Barón, es originaria de Tuxtepec, en la Cuenca del río Papaloapan, o río de las mariposas según el origen náhuatl de la palabra.
Cosas de la vida, la Cuenca del Papaloapan, colindante con el estado de Veracruz, se convirtió en los últimos años en una de las regiones más violentas de Oaxaca. Ahora, Karina, desde el cargo público que desempeña hace tres años, ha puesto especial atención a los programas de prevención del delito.
¿Es posible detener la violencia con bandas de música tradicional, coros infantiles, y emprendimientos artesanales? Ella asegura que sí.

Y lo que es más, señala que resulta menos costoso destinar presupuestos a las políticas de prevención de la violencia que a las acciones de combate a la delincuencia.
«Lo ideal es invertir en prevención de la violencia. Y desde el Secretariado lo estamos haciendo con el programa de Arte y Cultura por la Paz que a la fecha ha creado más de cien coros con niñas, niños y adolescentes, y que impulsa el fortalecimiento de cinco bandas filarmónicas en localidades con altos índices de violencia», explica.
Menciona que una de estas localidades es San Miguel Soyaltepec, municipio donde los altos niveles de inseguridad obligaron a las autoridades a instalar la presencia permanente de la Guardia Nacional y de policías estatales.
Cabe recordar que uno de los focos rojos se encendió en esta comunidad con población indígena mazateca y chinanteca, entre febrero y marzo de 2023, cuando dos familias fueron atacadas por grupos armados con un saldo de nueve personas muertas, entre ellas una mujer, además de dejar a un niño lesionado. Por esas fechas también fue secuestrado un profesor jubilado que, ante la imposibilidad de su familia de pagar el rescate, fue asesinado.
A finales de 2023, el SESESP impulsó la creación de una Banda Filarmónica infantil y juvenil, que poco a poco ha recibido instrumentos y a la fecha está a punto de completarse para llevar su música al interior y al exterior de su comunidad.
«Afortunadamente se ha ido trabajando con ellos y este tipo de acciones ayudan a que la juventud no sea presa fácil del canto de las sirenas de las camionetas o el celular último modelo que les ofrece la delincuencia”, expresa.
En el mismo sentido de contrarrestar la violencia desde sus bases, el SESESP gestiona financiamientos para que mujeres artesanas de Soyaltepec mantengan el bordado de huipiles y se alleguen recursos propios a fin de contrarrestar la violencia económica, expone Karina Barón, quien señala contundentemente a la violencia intrafamiliar, y en especial la que ejercen varones contra mujeres, es la más generalizada en el estado.
«Las mujeres de Soyaltepec hacen unos huipiles bellísimos. También rescatamos con la comunidad dos canchas de básquetbol que se pintaron con motivos de los huipiles y ya se han vuelto a usar, aunque el básquet no es el deporte más popular por allá, pero ya llegan a practicar hasta las chicas», detalla.
Acciones como éstas se multiplican en municipios y comunidades oaxaqueñas a través del programa Arte y Cultura por la Paz del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública del Estado de Oaxaca, con el objetivo de contener la violencia y la inseguridad desde sus raíces, concluye su titular.