Fotografía: CARMEN LETICIA PACHECO
OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- Aunque no se asume como feminista, Araceli Mancilla Zayas reconoce que su poema “La mujer del umbral” sí busca deliberadamente colocar a la mujer en un terreno que históricamente le ha sido negado: el de la intelectualidad.
Inspirada en los Diálogos de Platón, la poeta nacida en la Ciudad de México, naturalizada oaxaqueña luego de más de dos décadas de habitar en la Verde Antequera, escribió el mencionado poema de largo aliento, donde la única mujer convidada al “Banquete” de los filósofos griegos es una flautista que escucha la disertación sobre el amor.
“Tomo la voz de la flautista que amenizaba el banquete, la única mujer, de quien Sócrates decía que su música lo distraía y que prefería que la flautista se fuera al fondo a conversar con las mujeres, o que tocara para sí misma”, explica la autora.
Entrevistada en el patio del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, la también editora de la revista “El Espulguero”, que publica esta institución con el apoyo del artista plástico Francisco Toledo, dice como en tono de desquite: “De algún modo yo soy la flautista que dice: me sacaste del discurso, pero ahora, mucho tiempo después, hago el mío. Es un poema que no tiene la intención de ser feminista, pero que habla de lo que somos las mujeres”.
-¿Qué ha significado para Araceli Mancilla ser poeta en Oaxaca, donde hay más pintoras, bailarinas o actrices que poetas?
-Somos pocas, pero afortunadamente han ido sumándose más: Natalia Toledo, Rocío González, Irma Pineda; está Pilar González… Para mí no ha sido un conflicto, sino una oportunidad y a la vez un esfuerzo muy arduo aprender a escribir y expresarme tal y como lo pretendo.
Soy la que llega con su flauta al banquete del amor.
llego con los ebrios,
con los no convidados.
Mi música sigue aquella delicadeza de palabras
que mis acompañantes jamas podrán alcanzar.
Soy la única mujer.
Me siento capaz de llegar al discurso…
-“La mujer del umbral” también toca el tema del erotismo… ¿Representa algún conflicto para la poeta incursionar en este terreno… por los atavismos sociales?
-Yo como poeta tengo que ponerme por encima de algunas situaciones. Tengo un libro, “Instantes de la llama” sobre el tema. No sé ni he pensado en qué pensará el lector de lo que escribo, si como artista te pones a pensar antes de escribir, imagínate. Yo paso sin ver, escribo lo que tengo que escribir, lo único que me importa es que lo que escribo provoque algo.
No ha faltado quien me ha dicho que algunos de mis poemas les parecen pornográficos… Las mujeres tenemos mucho qué decir de nuestro cuerpo, pero también de la historia, de la filosofía, del erotismo, de las preferencias sexuales, y de tantas situaciones…
-Estará en el Encuentro Hacedores de palabras en homenaje a Vicente Quirarte. Háblenos de él.
-Es un estupendo ensayista, escribe teatro, historia, en fin. Además de ser un amigo que admiro mucho, creo que su discurso para ingresar al Colegio de México, “El laurel invisible” es algo de lo más extraordinario que le conozco. Cómo se expresa sobre los creativos mexicanos, y lo hizo cuando tal parecía que todo en el país era negativo. Estamos tan mal gobernados que nos tenemos un auto odio que a veces nos impide ver lo positivo de nosotros mismos.
yo podría ser Afrodita enferma de placer,
ser la de nalgas generosas, beber por las tardes
con las demás mujeres, y, al cantar un poema
entre geranios, enredarme en la cintura de la muchacha más tímida;
hacerla retozar lentamente en el calor de mi belleza…
Araceli Mancilla Zayas participa este jueves 22 de septiembre en el encuentro internacional Hacedores de Palabras a las 19:30 horas.