VILLA DE ZAACHILA, Oax. (sucedióenoaxaca.com/vía COMUNICADO).-Son las 8:00 de la mañana y a lo largo de los casi mil metros que cubren algunas secciones de las calles “Vicente Guerrero”, “10 de enero”, “Pezelao”, “Cosijoeza” y “Danniguibechi”, más de 700 locatarios comienzan a instalar sus puestos como cada jueves, Día de Plaza en la Villa de Zaachila, un mercado mestizo al igual que el nombre de sus calles.
El olor a chiles mezclados con la hoja de aguacate, la pimienta y el laurel, opacan en cierta medida el fuerte olor a la carne de chivo, la cual al cabo de unas horas se volverá tan jugosa que se desmenuza al tocarla.
El mercado “Alarii” se abarrota los jueves: donde antes había cinco tortilleras ahora hay diez; lo mismo sucede con los puestos de comida ya preparada y el menú se amplía: patitas de cerdo en vinagre, higaditos con huevo, quintoniles hervidos y brócoli capeado, opacan al tradicional huevo con arroz, chorizo con papas y verduras hervidas. En el exterior del mercado también se encuentran las fondas que ofertan el tradicional mole negro, el coloradito, verde de espinazo, estofado, frijoles con pata y caldo de pollo.
Con esta amplia gama de productos frescos tradicionales, el mercado de Zaachila es uno de los más bellos de Oaxaca y del mundo, dicen propios y visitantes.