ZAGREO Y* / Fotografía: “Mármol” de GUILLERMO VILLALOBOS
La mejor manera de aprender de los escritores
es enseñando al mismo tiempo. Profundizan mejor
un saber cuando lo profundizan para otros
BERTOLT BRECHT
En su momento de extrema vitalidad Bertolt Brecht elaboró el concepto realismo combativo. Se trata de una tesis de cinco puntos en la cual el autor bávaro ya va dibujando lo que después se conocería como teatro dialéctico; sobre el realismo combativo Brecht dice lo siguiente: “Un realismo inflexible, que lucha contra todo encubrimiento de la verdad, a saber, la explotación y la opresión, puede denunciar y difamar la explotación y opresión del capitalismo”
Como cualquier tesis, la de Brecht también se define frente a lo que no es. De tal manera que del otro lado del río se encuentran los autores que escriben a partir del subconsciente. Para el autor de Madre coraje esos autores debían admitir más consciencia en sus obras y con ello realizar piezas marcadamente instructivas. Para Bertolt la instrucción era fundamental porque era el camino hacia el saber; en su tesis los escritores precisan de un saber económico e histórico y la mejor manera de conseguir este saber es profundizando a través de los otros, de brindar el conocimiento a los otros. A este compromiso Bertolt lo llama la gran labor literaria.
Muchos años después de la muerte del autor alemán, cobijados bajo el dedo escrutador de Benito Juárez, los oaxaqueños navegamos sobre aguas más profundas. La vida misma, el continuo pulso de mantenernos vivos nos aleja de preguntas tales como si los autores oaxas están del lado consciente o subconsciente según Bertolt Brecht. O si acaso alguien habrán tomado la senda de la llamada gran labor literaria.
De la fauna literaria oaxa puedo advertir a las escritoras marginales, quienes publican con editoriales independientes dividiendo ganancias o sacando apenas para mantener los proyectos. Están también las escritoras centrales, cobijadas por el financiamiento privado o público que tienen acceso a las publicaciones y a cierta publicidad. La venta de sus libros poco importa porque son libros ya costeados, donde la pérdida no existe.
En ambos casos los escritores están vinculados a la enseñanza, ya sea a partir de un vínculo natural con la comunidad, o a partir de una beca que en su contrato exige visitar Oaxaca para dar un taller. En cualquier caso y a casi cien años del concepto de realismo combativo, el vínculo con la enseñanza es fundamental en la relación de un escritor con sus ideas y en cómo estas moldean las ideas propias de sus alumnos o escuchas.
Quizá la visión de Bertolt Brecht otorgue esa luminosidad que parecía perdida en la vida literaria oaxaqueña. Han sido los talleres, los círculos de lectura, las salas de lectura, los grupos, las asociaciones, los programas de lectura y los colectivos los que han revitalizado ese saber que ahora se advierte en la cantidad de libros y de autores oaxas.
En cuanto a la denuncia de los males del capitalismo que señala Brecht, no hay escritor oaxa que no lo señale en su obra. Esto sucede por el simple hecho que ser oaxa y ser escritora ya es un desafío en contra del lugar en el que el capitalismo quiere a los creadores y pensadores de esta bellísima ínsula al sureste del mundo.
*Zagreo Y. : escritor de tiempo completo. Sobrevivo porque Adri me mantiene. Gracias a un Dios que nunca muere nací en Oaxaca. Críticas, patrocinios o ganas de censura, llamar a la editora.