OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- En Oaxaca solo existe un organista profesional, el maestro Eliseo Martínez, organista titular de la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, asegura sin temor a equivocarse Margarita Mercedes Santiago Rodríguez.
El actual director de la Orquesta Sinfónica de Oaxaca estudió en Roma y tuvo en México como maestro al que es considerado el mejor organista de este país: Víctor Urban, agrega la también organista.
Margarita Santiago Rodríguez es la única mujer organista oaxaqueña formada profesionalmente en el Conservatorio Nacional de Música, donde fue su maestro José Suárez, a su vez discípulo de Víctor Urban.
Ha dado clases de música en el Instituto Maurice Ravel, y a su paso como colaboradora del Instituto de Órganos Históricos de Oaxaca, conoció todos los órganos históricos del estado y ha tocado la mayoría de ellos, pero le gustaría que este tipo de música fuera accesible para todas las personas y que hubiera más conciertos, y no únicamente en las iglesias.
La sonoridad de un órgano tubular es impactante
Dice que la primera vez que escuchó un órgano tenía 17 años y sucedió en el ex convento dominico de Yanhuitlán. “Casi vi a los santos y a los ángeles del cielo”, recuerda con una discreta sonrisa.
“El impacto que produce la sonoridad de un órgano tubular es único; por eso creo que es importante que Oaxaca tenga un órgano tubular con doble manual y pedales al alcance de cualquier persona que quiera aprender este instrumento, ya que los órganos históricos no son accesibles para todos, además que por su diseño ibérico no cuentan con pedales”, explica la organista oaxaqueña.
“Al no contar con pedales nos estamos perdiendo de apreciar y aprender, en el caso de estudiantes, gran parte del repertorio de los siglos XVII al actual, escrito para este instrumento”, subraya.
En Semana Santa, Margarita Santiago Rodríguez compartió con seguidores de Sucedió en Oaxaca algunas de sus obras favoritas de música sacra, interpretadas en su propio órgano, aunque, aclara, el repertorio es muy variado, no se limita a lo religioso ni al culto católico.
Esto me gusta más que el piano
Entre una interpretación y otra comenta que su fascinación por el órgano fue instantánea, por lo que terminando su preparación como instructora de piano, en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, se inscribió en la carrera de Órgano en el Conservatorio Nacional de Música, y más tarde hizo una especialidad de Música Sacra en Rottemburgo, Alemania.
“Empecé a leer sobre la vida de Juan Sebastian Bach, y eso me inspiró mucho. Pensaba: Esto me gusta más que el piano. Además me atrajo la música litúrgica, pues Bach era luterano, como otros grandes maestros de la música sacra”, comenta.
Margarita Santiago Rodríguez menciona que en el Conservatorio Nacional estudió en un órgano Tamburini, italiano, de cuatro manuales (teclados) y pedal completo, con 60 registros.
Este tipo de órganos son muy comunes en Europa, pero en México son escasos, y la mayoría de los que existen se encuentran en la iglesias, por lo que no son accesibles para aprender, salvo en visitas especiales.
Quiero que se conozca más este instrumento en Oaxaca
La organista cuenta con instrumento de dos manuales y pedales, eléctrico, con el cual practica y en breve brindará clases a personas de todas las edades, incluso a menores de edad.
“Quiero que se conozca más este instrumento en Oaxaca, hay muchos jóvenes que quieren aprender a tocar con pedal y que desean estudiar el órgano de manera regular, algo que no es tan sencillo porque lo que tenemos en las iglesias son órganos históricos que no tienen pedal, y la mayoría se encuentran fuera de la ciudad, además de que no son accesibles y sólo se utilizan en festivales una o dos veces al año”, indica.
Considera que Oaxaca forma parte de un circuito de órganos históricos junto con los estados de Guanajuato, Michoacán, Jalisco, Puebla y la Ciudad de México, sin embargo le hace falta darle vitalidad a los órganos existentes y formar organistas que los hagan sonar de manera frecuente a fin de forjar una cultura organística local.
“Es necesario aclarar que los órganos no solamente están en las iglesias, porque muchas personas que no son católicas no se acercan por esta razón. Yo, por ejemplo, tocaba en una cárcel en Alemania donde se reunían presos católicos, evangélicos y hasta musulmanes, en ritos que a veces oficiaba un sacerdote o un pastor”, relata.
El órgano se toca con las manos y con los pies
Mientras toca, el rostro de Margarita Santiago refleja la serenidad que transmiten obras de Bach como la Pasión según San Juan, considerada una de las obras más bellas de todos los tiempos, a decir del flautista y experto en música barroca, Horacio Franco.
Combinar la lectura de las notas, la ejecución en dos manuales y de los pedales requiere mucha práctica, pero ella muestra una gran destreza, ganada a lo largo de casi 20 años dedicada a este instrumento.
Con el objetivo de alentar una cultura organística en Oaxaca, Margarita Santiago Rodríguez planea llevar a cabo una serie de conciertos accesibles a todo público y en breve ofrecerá clases a quienes se interesen por aprender a tocar este instrumento.
Para mayores informes, comunicarse a: margarita_ricardez@yahoo.com.mx o a través de su cuenta de Facebook: Margarita Mercedes Santiago Ricárdez.
1 comentario
Muy hermosa labor quiere emprender muy loable y digna de admiración considero que tendrá bastantes alumnos ya que oaxaca es muy musical casi en todo el estado somos amantes de la música y so es música de calidad. Mejor enhorabuena le deseo mucho éxito.