1.- Peña Nieto improvisa y telepromter tiembla: “No creo que ningún presidente se haya levantado pensando como joder a México”. Eso se llama joder por omisión y también está catalogado como pecado grave.
2.-Javier Duarte y Guillermo Padrés son dos ex gobernadores que, primero jodieron a sus respectivos estados –Veracruz y Sonora- ahora andan como pollitos en fuga. Apúrense o se los jode la justicia.
3.- México Unido Contra la Delincuencia señaló que “joder a un país es nombrar como fiscal a un militante del PRI, primo del consejero jurídico y abogado en activo”. Esas sí son jodideras.
4.- Gabino Cué nadará de muertito en los últimos días que le quedan a su gobierno. Nadará en el fango de la corrupción de sus principales colaboradores. En plena temporada de muertos, el sindicato de salud, busca a un Tenorio.
5.- El pastor de la iglesia oaxaqueña, Monseñor Chávez Botello, busca un guía secular… Adivinaron, es el mismo gobernador electo, Alejandro Murat. No cabe duda, como dicen en mi pueblo, siempre hay un roto para un descocido.
6.- Reza en las escrituras: “Polvo eres y en polvo te convertirás”, pues bien hermanos, deben tener en cuenta que ahora está prohibido guardar su polvito en cajas o lanzarlo al mar. Se ofrecen capillas y criptas a cómodas mensualidades. Les garantizamos un descanso eterno.
7.- Dónde están los Mexicanos Primero, la Coparmex, el Consejo Coordinador Empresarial y todas esas “buenas conciencias”, cuando el país más los necesita. ¿Se les acabó el amor por México? Ahora que se trate de joder por joder, seguro aparecen.
8.- Según cuentan, los zapatistas no andaban muertos ni de parranda, estaban preparando un nuevo acto para joderse a AMLO y de paso a toda esa izquierda de Hello Kitty que abunda en la política de blof.
9.- Las mujeres están hartas que las estén jodiendo. Oaxaca sufre el flagelo de la violencia y los crímenes por razones de género. La situación está llegando al límite. La consigna que se repite en las movilizaciones es: “Ni una muerta más”.
10.- Octavio Paz reflexiona: “La resignación es una de nuestras virtudes populares. Más que el brillo de la victoria nos conmueve la entereza ante la adversidad”. De ahí que el “joder a México”, para los poderosos, cobre más sentido que ponerlo en movimiento.
Imagen: EL PIÑERO DE LA CUENCA