ERNESTO REYES
El diputado Gabriel Quadri, de Acción Nacional, se metió en el ojo del huracán al exhibir, en la tribuna cameral, sentimientos de odio e intolerancia hacia un sector que ha estado muy activo en exigir respeto a su forma de vida. Es una actitud que destila desprecio hacia la diversidad sexual y de la comunidad trans: transfobia.
La transfobia es hermana casi gemela de la homofobia, término que se refiere – lo dice la Conapred- al miedo irracional a personas con una práctica sexual homosexual. El temor hacia estas personas o a quienes parecen serlo, se suele expresar en el rechazo, discriminación, ridiculización y otras formas de violencia como el feminicidio, castigos corporales o exclusión en el ámbito laboral o escolar.
Varias diputadas de Morena han asumido el rol de defender a este sector. La diputada Marisol García Segura – quien llegó a este escaño procedente del gremio cultural y artístico-, le exigió a Quadri no pretender confundir a la opinión pública con posicionamientos que remiten a la época del fascismo.
Como cada que sube a tribuna Quadri termina su intervención con alusiones homofóbicas y transfóbicas, la morenista le advirtió que tendrá que hacerse responsable de las sanciones que, por discriminación, violación a los derechos humanos y fomento al odio se contemplan en la legislación mexicana porque en nuestro marco jurídico vigente ya no tiene cabida este tipo de discurso. Le recordó que el fascismo es un movimiento de la derecha radical empujado hacia un conservadurismo que constantemente manifiesta su odio al socialismo, el feminismo, y todo lo que huela a progreso y democracia.
Las personas trans y las no binarias, y en suma todas las mujeres, son expresión de la diversidad humana y nadie tiene derecho a discriminarlas, le recordó Marisol Gasé. Mucho más si – decimos nosotros- con la pena hacia quienes votaron por el candidato de Acción Nacional, este tipo ahora ejerce un cargo en la representación popular federal. Y pensar que hace muchos años, montado en un discurso supuestamente ecologista y de defensa del medio ambiente, Gabriel Quadri se hizo presente en actividades por la defensa del bosque, en la zona de los Chimalapas.
Antes, la legisladora Salma Luévano primero se rapó y luego se caracterizó como este sujeto, quien hasta en su arreglo personal, muy respetable, pero criticable, hace alusión al bigote de Adolfo Hitler. Ella ha demandado primero el desafuero y luego que se le instruya juicio político.
Desde desde hace 18 años, las personas homosexuales, bisexuales, transgénero o intersexuales (LGBTTI) tienen a salvo sus derechos y a no ser molestados en más de 70 Estados del mundo, incluyendo México, donde se acepta la diversidad y se reconocen plenamente sus derechos. En contrario, a quienes se atreven a atentar contra los mismos, se tipifican castigos, aunque falta más energía en la justicia mexicana para no permitir la impunidad. Como ejemplo, en la Ciudad de México, desde 2009, está permitido el matrimonio entre dos personas del mismo sexo y en las legislaciones estatales se ha avanzado en la construcción y defensa de estos derechos.
La legislación avanzó a partir de que en la ONU existió el convencimiento de que las personas LGBTTI habían sido víctimas de acoso, tortura, detenciones arbitrarias e incluso asesinato en todo el mundo, a menudo con total impunidad.
En nuestro país, existe un movimiento muy activo que ha pugnado en las calles y en las cámaras por avanzar en estas conquistas, pues una sociedad tolerante es aquella donde se acepta la diversidad y se reconocen los derechos de las personas, independientemente de su orientación sexual e identidad de género, creando un ambiente de respeto hacia ellas.
No obstante que en la Constitución se prohíbe discriminar por “preferencias sexuales”, que incluyen la orientación sexual y la identidad sexo-genérica, siete de cada diez personas consideran que en México siguen sin respetarse, a plenitud, los derechos de las personas de la diversidad sexual. Esto es un hecho, por lo cual debemos seguir denunciando a toda persona que abra la puerta a los crímenes de odio: aunque no le Quadri.
@ernestoreyes14