Al pueblo oaxaqueño
A los múltiples esfuerzos culturales
A colectivos artísticos y literarios
A los medios de comunicación
A las autoridades correspondientes
1.- PRONUNCIAMIENTO
El Tianguis Literario, Autónomo y Popular es un esfuerzo colectivo conformado por editoriales, librerías, escritores, gestores culturales, encuadernadores y esfuerzos diversos que comparten objetivos comunes: democratizar la cultura y la educación, construir espacios de difusión y reflexión respecto a las diversas problemáticas que compartimos como comunidad y poder vivir dignamente de nuestros oficios y profesiones.
Como Tianguis, hemos realizado dos ediciones con foros de discusión, presentaciones de editoriales locales, difusión de escritoras y escritores oaxaqueños y talleres gratuitos o de cooperación voluntaria. Se ha planteado reflexionar sobre temas como la gentrificación, la defensa del territorio, el racismo, la violencia contra las mujeres y contra las infancias, la diversidad de género, la apropiación simbólica y material de la cultura oaxaqueña por grupos de poder, entre otros temas. Esto, sin apoyo alguno de las Secretarías de Cultura Federal y estatal o de fundaciones culturales filantrópicas; todo se ha gestionado con la voluntad y los recursos de quienes integramos el Tianguis.
En esta tercera edición se presenta la necesidad de reflexionar ya no sólo respecto a la apropiación de recursos materiales y simbólicos del pueblo por parte de los grupos de poder en Oaxaca, sino también respecto a la apropiación de sus resistencias, luchas y esfuerzos, de conceptos y símbolos que históricamente pertenecen al pueblo oaxaqueño digno y rebelde, así como a los grupos que han sido vulnerados y despreciados por las elites que a su conveniencia y de acuerdo al clima político y sus necesidades económicas, los utilizan.
Un claro ejemplo de lo mencionado es la Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO) dirigida por el empresario Guillermo Quijas-Corzo y su esposa, la directora Vania Reséndiz Cerna. Con una cartelera repleta de palabras como “comunidad”, “resistencia”, “rebeldía”, “rebelión”, “paz”, “inclusión”, “lenguas originarias”, “feminismos”, “comunidad LGBTQ+”, entre otros términos que denotan la urgencia de visibilizarse como un proyecto democrático, inclusivo y de vanguardia, pretende legitimarse mediante discursos que desconoce en la práctica.
No somos ajenos al alcance que puede tener un proyecto privado, ni tampoco nos posicionamos en contra de su realización. El tema concreto son las formas, el acaparamiento de recursos públicos, el uso de dinero del pueblo oaxaqueño para el desarrollo de un monopolio empresarial (Almadía-Proveedora Escolar-Fondo Ventura), una plataforma al fin y al cabo, que a pesar de las buenas intenciones que pregone, no deja de ser lo que es: un negocio privado en donde el acceso a proyectos y editoriales locales se restringe a los beneficios económicos y políticos de sus promotores.
Si el gobierno encabezado por Salomón Jara se dice preocupado por los últimos lugares que ocupa Oaxaca en las estadísticas de lectura, tendría que reflexionar respecto a estas prácticas y cuáles son los beneficios y perjuicios tangibles a corto, mediano y largo plazo para la sociedad oaxaqueña de que un monopolio esté al frente de un evento de esta magnitud.
La descentralización del uso de los recursos públicos, el fomento y el apoyo del gobierno para que se multipliquen proyectos culturales, ferias de lectura y propuestas para compartir el conocimiento, así como el apoyo a las pequeñas editoriales, a librerías y bibliotecas de barrio y comunitarias, a escritores, a encuadernadores, a traductores, a gestores de lectura y a todo esfuerzo involucrado en un proceso de transformación social a partir de la cultura, es un imperativo que no puede postergarse.
Desde nuestra visión, consideramos que un proyecto democrático real tiene que edificarse desde la diversidad, no sólo usando a la misma como cartelera publicitaria, sino dando pie a que ésta construya a partir de sus múltiples sentires y pensares un proyecto que abarque el espectro sociocultural oaxaqueño y que se refleje en resultados concretos a partir de un trabajo permanente y autocrítico.
El cambio social no pertenece a un solo grupo. Somos una iniciativa ciudadana de múltiples colectividades y estamos poniendo sobre la mesa un asunto que siempre se ha manejado en privado cuando es de marcado interés público. No asumimos una fórmula inmutable; partimos de la incertidumbre de una época en donde la injusticia y el poder se maquillan con discursos y colores del pueblo, en donde el poder respalda al poder para perpetuarse con sus filantrópicos y convenencieros abrazos y sus intereses compartidos. Sin embargo, tenemos la certeza de que sólo la diversidad, el apoyo mutuo y los múltiples esfuerzos compartidos pueden salir avante ante este panorama.
No descalificamos a los proyectos, artistas o escritores que forman parte de los escenarios de la FILO; sabemos que hay gente comprometida socialmente, con un talento indiscutible, incluso algunos asumiendo una participación sin pago alguno, lo cual, a todas luces, es una explotación por parte de una entidad con un presupuesto de ocho millones de pesos, 65% del cual proviene de fondos públicos de los tres niveles, y a la luz de las cantidades desembolsadas para atraer a gente de “renombre” a ediciones anteriores. Lo que manifestamos es la necesidad de construir desde abajo una propuesta fresca y flexible en donde la toma de decisiones sea colectiva e incorpore a los diferentes grupos e individualidades que le dan vida, no sólo durante diez días de octubre, sino en todo el año, al escenario cultural oaxaqueño en sus ocho regiones.
Darle vitalidad a la palabra “autonomía” es edificar una casa común, es construir una propuesta atractiva no solo para nuestras necesidades, sino también para las jóvenes generaciones que enfrentan un panorama hostil en donde fenómenos como el crimen organizado cooptan sus sueños y aspiraciones. ¿Qué ofertas culturales hay para los barrios y las periferias? ¿Acaso sólo un puñado de elegidos tienen derecho a ellas? ¿Qué propuestas hay desde los barrios y las periferias y cómo respaldarlas? No hay preguntas, no hay respuestas, no hay diálogo ni un interés genuino por transformar la vida en algo digno de vivirse.
(…)
Al final, la FILO es un instrumento de un particular, sustentado por dinero público, para los fines comerciales, empresariales, de networking y relaciones públicas, de este particular, Guillermo Quijas-Corzo, que ya está aprovechando esta coyuntura sumamente provechosa para aumentar las operaciones de su editorial (y otros productos) en España… con la fachada de ser una iniciativa “independiente” y “rebelde”.
Ante este panorama hoy manifestamos:
¡Basta de cacicazgos y monopolios culturales! ¡No más acaparamiento de los recursos públicos! ¡Democratización de la educación y la cultura! ¡Los libros a las calles! ¡Vivan las bibliotecas comunitarias! ¡Dignificación de los oficios y profesiones del mundo del libro y la escritura! ¡ Viva el apoyo mutuo! ¡Qué florezcan más iniciativas culturales desde el pueblo y para el pueblo! ¡Viva el Tianguis Literario, Autónomo y Popular!
2 PLIEGO PETITORIO
Pliego Petitorio en Políticas Culturales para Librerías y Editoriales Independientes
Nosotros, propietarios y defensores de librerías y editoriales independientes, en busca de apoyo y promoción de la cultura y la literatura local, presentamos este pliego petitorio a las autoridades gubernamentales y organizaciones culturales pertinentes:
- Fomento a la lectura: Solicitamos programas de promoción de la lectura que incluyan la creación de clubes de lectura, eventos literarios y campañas de lectura en escuelas, bibliotecas, comunidades locales y espacios públicos.
- Apoyo financiero: Demandamos subsidios y fondos de cooperación para librerías y editoriales independientes, con el objetivo de cubrir costos operativos, adquisición de inventario y promoción cultural.
- Exención de impuestos: Proponemos la exención o reducción de impuestos para librerías y editoriales independientes que demuestren su contribución a la comunidad a través de eventos culturales y promoción de autores locales.
- Acceso a editoriales independientes: Exigimos el apoyo gubernamental para la promoción de editoriales independientes y autores locales, facilitando la disponibilidad de sus obras en nuestras librerías y bibliotecas.
- Espacios culturales: Solicitamos la creación de espacios públicos o subvencionados donde las librerías y editoriales independientes puedan organizar eventos, charlas y presentaciones literarias.
- Políticas antimonopólicas: Exhortamos a la implementación de políticas que regulen el control de las grandes corporaciones editoriales y minoristas, para fomentar la competencia justa y la diversidad en la oferta literaria.
- Educación y formación: Pedimos programas de formación y capacitación para propietarios y personal de librerías independientes, para fortalecer sus habilidades de gestión y promoción cultural.
- Promoción de autores locales: Demandamos la inclusión de autores locales en programas escolares y bibliotecarios, así como en ferias y festivales literarios financiados por el gobierno.
- Acceso a recursos digitales: Solicitamos asistencia para la creación y promoción de plataformas en línea que permitan a las librerías y editoriales independientes competir en el mercado digital.
- Transparencia en políticas culturales: Exigimos que las políticas culturales sean reales, transparentes y accesibles para que las librerías y editoriales independientes puedan participar y beneficiarse de manera justa.
- Auditoría: Exigimos una auditoría fiscal del dinero público erogado en las últimas ediciones de la FILO, junto con datos concretos de cuáles beneficios ha conllevado este gasto para el público. Incluyendo comidas, hoteles, vuelos de avión, fiestas y la barra libre en el segundo piso del Centro de Convenciones.
- Feria del libro independiente: Solicitamos apoyo económico para la gestión de una feria de libro independiente que incorpore y priorice a escritorxs, editoriales, librerías, fanzinerxs y los múltiples proyectos que dan vida a la escena cultural oaxaqueña todo el año, no sólo en octubre. Si se puede encontrar ocho millones para la FILO, no se puede argumentar una falta de dinero.
- Lenguas indígenas: Exigimos que se hagan valer los programas públicos que promuevan la publicación y promoción de literatura escrita en las lenguas originarias de Oaxaca.
Este pliego petitorio representa nuestros esfuerzos para fortalecer la presencia y el impacto de las librerías y editoriales independientes en la promoción de la cultura y la literatura en nuestra comunidad y en todo el país. Esperamos que estas medidas contribuyan a la preservación y el crecimiento de estos importantes espacios culturales.
Manifiesto dado a conocer este lunes 9 de octubre en la librería El burrito, con la participación de editores y libreros independientes de Oaxaca.