Fotografía: CINEGARAGE.COM
OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- Los mejores quince años de México no fueron los de Rubí, sino los de Nashely Aragón, que quedaron para la historia en la película documental “XV en Zaachila” (1999) del cineasta oaxaqueño Rigoberto Pérezcano (Zaachila, 1974) .
Luego de su fiesta, Rubí se convirtió en imagen publicitaria de Amazon, una de las tiendas virtuales más grandes del mundo; a 18 años de sus quince, Nashely es comadre del cineasta nosolo ha escalado con paso firme en el séptimo arte y, además, fundó la asociación civil OaxacaCine que exhibe en la ciudad lo mejor del cine mexicano y extranjero.
Después de “XV en Zaachila”, Rigo estuvo nominado a diez premios Ariel en 2003 por su película “Norteado” de los cuales cosechó uno por Mejor Edición.
Con su más reciente cinta, “Carmín tropical”, el realizador ganó en 2015 el Premio al mejor largometraje en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
Pero “XV en Zaachila” es un trabajo especial en la trayectoria del director oaxaqueño por varias razones: fue su primer mediometraje, lo realizó en su propia tierra, recibió el premio al mejor documental en el FICM, y tuvo un alcance internacional, en tiempos en que no existían las redes sociales, gracias a que se transmitió por el canal de televisión National Goegraphic.
Sin embargo, lo más importante de la cinta que muestra los preparativos y la realización de la fiesta de quinceaños de Nashely, conforme a la costumbre de Zaachila, es que le dio una familia de amigos, una comadre y ahijados.
“Estaba haciendo cuentas hace unos días porque me encontré Nashely, la protagonista de la película, y nos preguntábamos cómo vamos a festejar los 18 años. Ella es ahora mi comadre, tiene dos hijos, uno de ellos, el mayor, ya va a entrar a secundaria.
“El tiempo vuela y yo muy feliz porque tenemos una relación muy cercana. Somos familia, Y siento mucho orgullo de haber hecho esa película. Desde entonces quería vincularme con mi comunidad. Ahora quiero que los chavos vean buen cine y se cultiven con películas de calidad”, comenta.
El realizador señala que mantiene una relación muy cercana con su tierra, Zaachila, a donde acude cada jueves al disfrutar del mercado, al que llega la gente que viene a vender sus productos orgánicos que no pretenden ser orgánicos, sino que lo son de manera natural desde tiempos ancestrales.
Recuerda que al igual que muchos de sus paisanos, en su juventud quiso ser ciclista y boxeador, “pero afortunadamente un día encontré un casete de video VHS en buen estado, y dije: a esto me quiero dedicar”.
Finalmente, Rigo informa que está trabajando en la tercera película de su trilogía oaxaqueña.
“Voy por mi tercera película, se llama Los amantes se despiden con la mirada, no voy a decir de qué va, y estoy muy contento de filmar en Oaxaca, aunque no es nada sencillo”, concluye.