EDGAR ALDAIR PÉREZ ORTIZ *
OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- En el mes de mayo sacó su ficha de inscripción en la página web de la UABJO e hizo sus exámenes de admisión. En la preparatoria se había caracterizado por su inteligencia y dedicación. Hizo sus exámenes sin problema alguno. Sus ojos se llenaron de alegría cuando encontró su clave en la lista de los aceptados. Su sueño de estudiar la licenciatura en administración de empresas empezaba a construirse con mucha más fuerza.
Recibió un correo que lo llenó de tristeza: tendría que pagar 317 pesos de inscripción, nueve mil de cuota de apoyo a servicios educativos y mil del curso de inducción, es decir, más de diez mil pesos para poder ingresar a la facultad de Contaduría y Administración de la UABJO. Su madre no tenía el dinero para pagar esa cantidad.
El joven empezó a pensar qué hacer y acudió a trabajar pero solo logró conseguir un poco de más de mil pesos en una semana de trabajo. Empezó a buscar en la red. Hizo una búsqueda en Google y descubrió que hay una Asociación Civil que defiende a personas indígenas: Litigio Estratégico Indígena A.C. Se entrevistó con Carlos Morales Sánchez, presidente de la AC y empezó a recuperar la esperanza.
Promovieron un juicio de amparo ante el juzgado Octavo de Distrito en Oaxaca. Un juez federal ordenó a las autoridades universitarias que fuera inscrito sin pagar la inasequible cantidad.
El 10 por ciento de la población en México son personas indígenas pero según estudios de la UNAM solo el 1 % de la matrícula universitaria forma parte de este sector.
El 30 de las personas indígenas en México vive en pobreza extrema. No hay piso parejo para todos.
En México miles de jóvenes no tienen la oportunidad de acudir a la universidad. La falta de oportunidades los obliga a subemplearse o a irse a los Estados Unidos, o peor aún a las filas del crimen organizado.
La confianza vuelve a brillar en sus ojos. El juicio de amparo se convirtió en un instrumento para la protección al derecho de acceso a la educación. Para empezar a cambiar el estado de cosas en este país es necesario seguir preparándose.
*Edgar Alair Pérez Ortiz es Premio Nacional de la Juventud, estudiante universitario e integrante de Litigio Estratégico Indígena A.C.