ARELI MORALES OLIVERA*
En días pasados trascendió que en las calles de una ciudad francesa se montó una exposición de Alebrijes monumentales provenientes de nuestro estado.
“Lille 3000 Eldorado”, es el nombre del festival que se lleva a cabo en la ciudad de Lille, Francia, el cual tiene como invitado de honor en esta edición a nuestro país y Oaxaca es uno de los participantes más destacados.
El propósito de este festival es dar a conocer las expresiones culturales y artísticas de nuestro país, dando un énfasis especial a los problemas migratorios que enfrenta nuestra región.
Este evento, nos resulta similar al que se tenía programado en el 2011 denominado como el “Año de México en Francia”, a diferencia del Festival Lille 3000 que tiene duración de 6 meses y se lleva a cabo únicamente en esta ciudad; el evento del 2011 comprendía una serie de actividades a lo largo del todo el año en diversos escenarios de todo el territorio francés.
En ese entonces el evento se canceló tras una serie de acontecimientos que involucraron a una ciudadana francesa acusada de secuestro y las autoridades de ambos países, el hecho fue controversial en ambos países pues las actividades culturales programadas con antelación se vieron afectadas por las posturas políticas de sus países.
En esta ocasión, el marco político del Festival Lille 3000 Eldorado no involucra ninguna tensión política entre ambos Estados, sin embargo retoma la relación Estados Unidos-México que se ha visto mermada por las líneas de acción de su administración actual, los países europeos han encontrado en esta situación una oportunidad para conocer de cerca la problemática migratoria en México y su repercusión en la sociedad mexicana a fin de estrechar sus lazos y minimizar el poder estadounidense en la zona latinoamericana.
Históricamente los países europeos como Francia o Inglaterra han buscado fortalecer su presencia en América Latina para restarle influencia al país norteamericano. La alcaldesa de la ciudad de Lille, Francia; Martine Aubry ha descrito este evento como: “Una hermosa ocasión para fortalecer la amistad entre nuestras naciones en un momento en que las relaciones entre Estados Unidos y los países de América Latina se debilitan y miran hacia Europa”.
Es motivo de orgullo que nuestra cultura sea admirada en otras latitudes, que nuestras realidades traten de ser comprendidas para fortalecer las relaciones de amistad con otras naciones, no así, ser objeto de estrategias políticas y que se busque utilizar estas actividades como moneda de cambio para fortalecer relaciones de poder. Esperemos que este no sea el caso.
*La autora es Licenciada en Relaciones Internacionales