OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- Lo importante en un círculo de lectura no es leer, sino conversar, por eso, cuando Rafael Cessa acude a impartir una de estas actividades a jóvenes o adolescentes, y le preguntan qué van a hacer en el taller, él les dice: “nada”.
“Yo les digo que no vamos a hacer nada, que solo vamos a conversar de lo que ellos quieran, pero mi reto, el mío, es terminar hablando de libros, y en la siguiente sesión les llevo un libro que tenga que ver con lo platicado. Al principio nadie quiere comentar y con el transcurso de los días todos quieren intervenir”, comentó el mediador literario dedicado a este oficio desde hace más de diez años.
Rafael Cessa, con formación en Filosofía y Letras, impartió el fin de semana el taller denominado “Y tú, qué piensas? Random, Taller de Conversación Literaria”, dirigido a mediadores de lectura que se dieron cita en el Centro Cultural San Pablo.
Organizado por el Colectivo Colijbrí Oaxaca como parte de los festejos por su tercer aniversario, el taller tuvo como eje central la charla y la lectura de solo 5 poemas para niños del libro La alegría de querer del escritor colombiano Jairo Anibal Niño, que dieron pie a una extensa conversación con la cual ejemplificó por qué él prefiere dar talleres de conversación literaria que de lectura.
El punto clave para que las y los adolescentes se acerquen a los libros, expuso, es encontrar primero un efecto que les haga saber que son capaces de comprender, y que leer un libro es solamente eso, interpretar para sí mismo, y luego, en grupo, conocer las interpretaciones de otras personas, que pueden o no ser coincidentes.
“Mi objetivo no es que lean, sino que salgan hiper fortalecidos para su comunicación”, recalcó Rafael Cessa quien reconoce que empezó a adentrarse en la lectura acabando el bachillerato, y ahora trabaja en la Ciudad de México círculos de lectura en las preparatorias de la UNAM, donde ahora mismo prepara un ambicioso programa de impulso al libro ligado a la celebración del 80 aniversario de Batman.