Fotografía: CARMEN LETICIA PACHECO
SANTA LUCÍA DEL CAMINO, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- La presentacion de libro Voces del Zempoaltépetl fue a la manera del pueblo mixe: hospitalaria, ceremonial y con un contagioso sentido de hermandad.
Personalmente, el autor, Federico Villanueva Damián, recibió a cada asistente con un obsequio: una bromelia traída de las montañas y un llavero con una palabra en lengua mixe.
En el cuarto día de la 38 Feria Internacional del Libro de Oaxaca, la literatura mixe, como si dijéramos la española, la francesa o la portuguesa, tomó su lugar en la República de las Letras ante un variado auditorio expectante.
El primer comentarista fue el músico Nathanael Lorenzo Hernández, director del Instituto Intercultural Calmecac.
“Me es grato participar en esta presentación, no solo porque el maestro Federico sea un gran amigo, sino por la elegancia con que invita a las nuevas generaciones a sentirse orgullosos de su cultura”, fueron sus primeras palabras tras un breve saludo en zapoteco.
“Voces del Zempoaltépetl traspasa las fronteras de la cultura ayuuk, esa filosofía del ombligo es un llamado a todos los pueblos indígenas a que no mercadeen con sus valores comunitarios; ese ir y venir al mercado de Ayutla es darle una bofetada al capitalismo rapaz que nada sabe de comunidad; esa invitación a ver las nubes es un regaño para todos aquellos que están pegados al televisor, al celular o a la superficialidad de lo moderno”, agregó el compositor con la firmeza que le caracteriza.
“Este libro rompe lo exótico de la cultura mixe y lo devuelve a su lugar; destroza la imagen vendible del souvenir ayuuk y le devuelve su valor y su esencia; desde mi punto de vista como pedagogo, compositor y director musical, el maestro Federico Villanueva le acaba de obsequiar a toda la sierra mixe, y a todo Oaxaca, un material estricto, claro y coherente, que tarde o temprano mi generación se verá obligada a consultar”, añadió.
“Me reconforta como un amante de nuestras culturas oaxaqueñas. Gracias, maestro, por escribir y compartir, porque mientras tengamos algo que contar de nuestras culturas, evitaremos la extinción. Porque mientras tengamos letras que leer, sonidos que escuchar, colores que observar, ritmos que danzar, y escritores como usted, no sólo la cultura mixe, todas las culturas del mundo, no perecerán”, concluyó.
La profesora Flor García Velásquez, coordinadora del Centro de Maestros en Ayutla, abrió su participación con un mea culpa.
“Debo reconocer que durante muchos años, el magisterio fue el responsable de obligar a niños y niñas a dejar de hablar su lengua; ahora el maestro Federico Villanueva nos reivindica”, dijo.
Antes de ser un libro, Voces del Zempoaltépetl fue un volante, un poema, una frase para un programa escolar, un llavero. “Que sirva de inspiración para difundir las lenguas indígenas, para que se animen a escribir más personas en su propia lengua”, expresó.
En seguida fue la lingüista Yásnaya Elena Aguilar Gil, quien tomo la palabra para manifestar que el libro de Federico Villanueva es un acontecimiento cultural que para ella, en lo personal, representa un sueño de infancia realizado.
“Yo soy de Ayutla, y cuando fui niña era impensable tener un libro como el que hoy presentamos. Cuando yo llegué por primera vez a la escuela fue un shock oír una lengua que no entendía, el español. Y aprender a leer y escribir en un idioma que no era el que aprendí con mi mamá, con el que jugaba con mis amigos, con el que cantaba.
“Imaginen que ustedes crecieron con el español y entran a una escuela donde enseñan en alemán, donde no se habla nada el español y castigan a quien no hable alemán. Así me sentía yo ante el castellano”, explicó.
“Ojalá que al morir tenga al menos medio librero con libros como éste”, concluyó la lingüista mixe.
Tras relatar que gracias a un hermoso libro que le regalaron, empezó a imaginar la publicación del suyo, en una edición digna, no con fotocopias ni en mimeógrafo, como se acostumbraba difundir material de lectura en lenguas indígenas, el maestro Federico Villanueva Damián dirigió y supervisó la edición de Voces del Zempoaltépetl, “una chulada de libro” concebido y escrito en mixe, y posteriormente traducido al castellano, que reúne textos guardados por su autor a lo largo de muchos años.
El escritor originario de Ayutla, formador de varias generaciones de maestros normalistas, servidor público de su comunidad y permanente promotor de la lengua y la cultura mixes, consideró que su libro es una aportación a la literatura indígena y al camino que han iniciado las letras mixes en nuestro país.
Porque, dijo al concluir: “Estamos apenas balbuceando la escritura y la lectura en mixe”.