SAN PEDRO YANERI, Ixtlán de Juárez (sucedióenoaxaca.com).- San Pedro Yaneri se fundó en un lugar donde se encontraba un árbol de pino al que escurría mucha trementina; y fue de ahí que tomó su nombre Yaga nëri, etimología zapoteca que se descompone en dos partículas: Yaga significa palo y Nëri significa trementina, traduciéndose literalmente como árbol de trementina.
Ésta es parte de la investigación realizada por estudiantes de la Escuela de Educación Secundaria Comunitaria Indígena, coordinada por su profesor Moisés Ramos García, quien además escribe y compone en lengua zapoteca.
Alumnos y alumnas de la generación 2015-2018 buscaron el origen de su pueblo en fuentes históricas y bibliográficas, y mediante entrevistas con los ancianos y ancianas, a quienes llaman “Portadores de conocimiento”, para integrar un documento que pretende publicarse en un futuro próximo.
De acuerdo con esta investigación, los primeros habitantes de San Pedro Yaneri llegaron de un lugar conocido como Ladú, nombre de un señorío zapoteca que según sus raíces significa lugar del hilo, y se establecieron ahí luego de haber emigrado de diversos territorios durante muchos años.
La historia de la fundación de Yaneri fue dada a conocer en primer lugar a las y los habitantes del pueblo en una asamblea que contó con la participación de autoridades y de abuelas y abuelos “portadores del conocimiento”.
El maestro Moisés Ramos explica que el modelo de las secundarias comunitarias se basa justamente en los conocimientos comunitarios; los jóvenes aprenden a partir de las experiencias y conocimientos que aportan los padres de familia y ancianos de la comunidad, sin que este modelo educativo excluya los conocimientos hegemónicos.
“En nuestra cultura indígena, la naturaleza y nuestro entorno es lo que se vincula con nosotros. Para mí es un orgullo trabajar en nuestros pueblos indígenas, tener una constante vinculación con la naturaleza, platicar y convivir con mi gente, escribir y cantar en lengua indígena. Todo eso me hace sentir parte de la historia viva de nuestras comunidades y orgulloso de mis raíces”, expresa.
Moisés Ramos agradece a la escritora Araceli Mancilla la revisión y corrección de estilo del documento que se encuentra listo para su publicación en cuanto consigan los recursos necesarios para ello.