OAXACA, Oax. (sucedióenoaxaca.com).- En cuatro años, esta mujer alemana, nacida en Bremen, se conoce prácticamente la totalidad de especies que alberga el Jardín Etnobotánico de Oaxaca: 950 de las ocho regiones del estado.
También conoce su procedencia, su antigüedad, cómo fueron poblando paulatinamente las más de 2 hectáreas que comprende lo que ella denomina, y que alguna vez lo dijo el pintor Francisco Toledo, “una obra de arte natural”.
Con motivo de la celebración del Día Nacional de los Jardines Botánicos, el sábado 06 de julio se realizó un programa de actividades que incluyó paseos gratuitos por el espacio que tuvo sus inicios en 1998 con el asesoramiento de los artistas Francisco Toledo y Luis Zárate.
Desde entonces, lo que fue el huerto de los frailes dominicos se ha convertido en un muestrario de especies endémicas de las ocho regiones de Oaxaca, el cual se ha ido conformando a lo largo de 20 años bajo la dirección de un experto apasionado de Oaxaca, Alejandro de Ávila Blomberg.
Ursula, quien en su país era profesora de biología, es la encargada de guiar los recorridos en idioma alemán. Matiza sus explicaciones con bellas historias de la naturaleza. “¿Saben por qué los chiles se ponen rojos? ¿Para decirnos que ya los podemos cortar para hacer la salsa? No. Para que los pájaros sepan que ya están maduros y los pueden comer”.
También explica que en su habitat natural, muchas de las plantas del Jardín Etnobonático son polinizadas por abejas o pájaros, pero en en este sitio esa tarea les toca a los jardineros. Así lo hacen con las plantas fósiles que datan de hace 200 millones de años y que se dividen en machos y hembras, por lo que la mano del hombre debe intervenir para su reproducción.
La guía alemana, que luce un huipil del Istmo de Tehuantepec, muestra también al ancestro silvestre del maíz, el teocinte, que de acuerdo con recientes estudios fue domesticado en el valle de Oaxaca entre Mitla y Yagul, hace entre 7 mil y 10 mil años.
El teocinte forma parte del área destinada a especies comestibles como el maíz, frijol, calabaza, chile, quintoniles, chepil, chepiche, ligadas a la milpa, base de la agricultura tradicional.
Y pregunta al grupo si han tomado alguna vez tejate. Para ellos tiene una noticia: las jícaras en donde se sirve la deliciosa bebida de flor de cacao, antes de haber sido decoradas crecen pegadas al tronco de un árbol con un amplio follaje de finas hojas.
Al término del recorrido de aproximadamente 40 minutos, el director del Jardín Etnobotánico, Alejandro de Ávila, obsequia personalmente a los visitantes un ejemplar de alguna de las especies que alberga este sitio: pochote, guiechachi, cactus, agaves, etc.