TAMARA LEÓN*
Gracias. “Gracias” es la palabra que mejor describe El infinito arte femenino, un encuentro de artistas visuales de la que da ejemplo esta exposición.
En El infinito arte femenino es una muestra en la que presenciamos la diversidad, la inclusión, la pluralidad y el respeto de la libertad para la creación. Es una muestra en la que cohabitan técnicas, motivaciones, colores, formas diversas que enriquecen cada una de las obras expuestas.
Los diversos elementos se anudan en lo que constituye nuestra condición de mujeres: las preocupaciones de las que platicamos y que compartimos unas con otras, las maneras en que el cuerpo se manifiesta en el lenguaje visual; las abstracciones de nuestros sentimientos; los animales como símbolos; el mostrar conchas como protecciones; nuestro sagrado maíz, los incontables elementos relacionados con la riqueza de nuestra maravillosa cultura.
Estos son acciones que se relacionan con la sororidad, un término reciente en nuestra lengua que define la hermandad, y solidaridad entre las mujeres que creamos redes de apoyo para afianzarnos desde nuestra complicidad femenina. Se necesitan palabras nuevas para lograr que se produzcan cambios en la cultura patriarcal en la que vivimos, en la que aún vemos incrustadas las discriminaciones.
Sin abundar en teorías obvias, pero necesarias, nombrar lo que sucede en el contorno nos orilla a hacer reflexión con mujeres y hombres, para lograr verdaderos cambios sociales y establecer la presencia y la fraternidad entre las mujeres.
Gracias por mostrarnos estas caras del inagotable artificio femenino en hermandad, fraternidad, cooperación, participación: en sororidad.